Carne argentina por el mundo

Asamodo: la experiencia del asado argentino

Este emprendedor alemán se inspiró en la cultura del asado para diseñar parrillas con estilo argentino y promover una forma distinta de cocinar y compartir

"Para mí, el asado no es solo una técnica para cocinar carne, sino una forma de estar juntos, de compartir tiempo", dice Raid Gharib, fundador de Asamodo, una empresa alemana que busca acercar la cultura del asado argentino a Europa a través de sus parrillas y cortes típicos. Nacido en Siria y criado en Alemania, Raid conoció la calidez latinoamericana durante una estancia en Perú y una pasantía en Brasil. Aquella experiencia, marcada por la convivencia y las sobremesas, fue la semilla de un proyecto que hoy combina diseño, gastronomía y cultura.

El gusto por los asados en familia ya lo acompañaba desde chico, pero fue en 2021 cuando decidió diseñar su propia parrilla. "Quise comprar una parrilla argentina y no encontré lo que buscaba. Entonces empecé a fabricar una", cuenta. Así nació Asamodo, con la idea de ofrecer algo más que un producto: una experiencia.

En Alemania, donde todo se organiza con puntualidad, Raid encontró en el asado argentino un contrapunto. "Acá te invitan a comer a las cinco en punto, comés y te vas. En cambio, en el asado argentino el fuego es el comienzo. Se charla, se pica algo, se disfruta del proceso", explica. Esa filosofía del tiempo compartido es la que busca transmitir a sus clientes: una manera distinta de reunirse, más relajada y comunitaria.

El emprendimiento creció en un mercado donde casi no existían referencias al asado argentino. "Cuando empezamos, habría diez o quince pequeños productores de parrillas. Producir en Alemania es caro, así que apostamos a la alta calidad", comenta. En ese camino, Raid conoció a la familia Trípodi, importadora de carne argentina desde hace tres décadas. Junto a ellos comenzó a ofrecer cortes típicos como vacío o matambre, desconocidos para la mayoría de los consumidores locales. "Queremos ser la marca que introdujo el asado argentino en Alemania y Europa", afirma.

Además de las parrillas -hechas en acero y diseñadas para integrarse a las cocinas exteriores que hoy son tendencia en Alemania-, Asamodo ofrece cursos y degustaciones para enseñar la cultura del fuego. "Primero instalamos la infraestructura: la parrilla. Después viene la experiencia", dice. Los cursos se extenderán a Austria y Suiza, con el objetivo de expandir la comunidad del asado en todo el centro de Europa.

La marca se posiciona en un segmento de consumidores de clase media y alta, con interés por el outdoor y la buena carne. Sus clientes suelen ser familias o parejas con casa y jardín, aunque también abastecen a eventos y servicios de catering. "Nuestro primer gran evento fue un asado extremo durante la Eurocopa, con una vaca entera y más de 2.000 personas. Fue una acción de marketing impresionante", recuerda Raid.

Además de las parrillas y la carne argentina, Asamodo comercializa chimichurri, que sorprendentemente se ha convertido en su producto más popular. "En las ferias se vende más que la parrilla. Es una puerta de entrada al asado: muchos lo prueban, se entusiasman y después compran la parrilla", cuenta.